jueves, 30 de julio de 2015

RETOMANDO

Había perdido el interés de escribir, desde mi última entrada en el blog a finales del 2011 mi vida había estado por innumerables choco aventuras, todas ellas registradas en mi cámara y otras en textos que me hacían recordar lo bello de este país. Había disfrutado tanto en el departamento de Putumayo en el 2012 que cuando tuve que regresar a Bogotá iba añorar ese paraíso terrenal.



Aun así, esos bellos recuerdos los iba a guardar en mi cabeza y aunque ya han pasado tres años, los recuerdo y los vivo como si fuera ayer, he estado dispuesto a relatar todas las cosas que disfruté, sin embargo, no tenía la inspiración de volver a escribir mis historias luego de la fuerte lluvia que dañó el archivo que llevaba de esta experiencia. Si tan solo hubiera escrito algo pequeño, ínfimo pero significativo en el blog, pero no fui capaz de hacerlo, luego de pensar llegó la hora de reactivar tantas cosas que dejé pendientes y por las cuales me sentía a gusto, creo que ya es hora de volver a “palabrear” un rato.

Por cosas del destino, había dejado las chalupas, la espesa selva amazónica y la tranquila ciudad de Mocoa, para regresar y enfrentarme al frío de la capital, solamente para iniciar un nuevo proceso dentro de mi profesión como docente, aunque la tarea no iba ser fácil, pensé que sería una oportunidad para aprender y poder conocer de cerca la dura labor de trabajar con niños y niñas. Había llegado a CIFAL hacer trabajo de acompañamiento, pensé que iba ser fácil y sencillo, no creerán que los próximos meses serían caóticos a medida que se iba adentrando en el trabajo social y educativo con población infantil.

Este trabajo me iba a pasar lo mismo cuando elegí estudiar para ser docente, iba a entrar a un periodo de prueba donde evaluaría y dependiendo de la satisfacción con el grupo, decidía quedarme o escoger otra cosa. El destino me diría que el 2013 no era la oportunidad de regresar al hermoso departamento de Putumayo, por lo que fue un año de constante paciencia, control de la voz y manejo de grupos; era cierto que a diferencia de los jóvenes, trabajar con un niño podría ser más complicado.

Empezar desde ceros con un grupo de niños puede ser el mejor curso para un primiparo que desee entender los propósitos de la educación, eso me pasó a mí a pesar de tener un titulo profesional y tener experiencia en otros espacios, no puedo olvidar las veces que tuve que sacar a la fuerza aquel joven de 12 años que no le gustaba hacer tareas, sino provocar a los demás e incluso insultarlos. No olvidaré la vez que este joven intentó apuñalarme con un compás, todo porque otro compañero no quería jugar con él y lo tenía irritado, siempre es bueno decirle a los otros niños de los otros cursos que cuando presencien una escena de groserías e insultos, siempre entonen alguna canción para que no escuchen estas palabras de grueso calibre, que a veces suelen oir cuando desobedecen o ven cualquier gresca en la calle.

Cualquiera que le cuente todo lo que me pasó esa vez se va a sorprender y dirá “Me imagino que usted renunció de inmediato”, pues no, lamentablemente al joven lo expulsaron del programa y yo seguía normal mi rutina como docente. Es claro que si usted pierde la voz por tanta gritadera y llamados de atención, también puede hacer uso del pito para llamar al orden del grupo. Pudo haber sido la mejor estrategia hasta cuando uno se da cuenta que a punta de pito no se educa a nadie. Ese fue mi primer año, había confrontado todo lo que estudié y el sentido romántico que cultivé para anhelar un mundo mejor, tan bellas palabras que por un momento se volvieron en un bla, bla, bla, bla…

Sin saberlo, el destino me insistió que negara una oferta de trabajo donde el pago era mejor en comparación al lugar donde estaba; pa’l carajo la prueba de admisión, la entrevista individual y la entrevista grupal, solo era cuestión de cruzar los dedos para que no me llamaran y seguir con los niños al año siguiente.


El 2014 dos angelitos hermosos de 8 años llegarían a mi vida como si nada, sus mordiscos y patadas sutiles sería la rutina a seguir todos los días, de vez en cuando no hacían tareas, molestaban a otros, cogían a golpes las sillas y mesas. Fue un milagro que ese año no perdí la voz por gritar, me sentía más blindado que nunca para manejar situaciones, sin necesidad que los estudiantes cayeran en la retahíla de groserías, había avanzado, pero me sentía como un primíparo, todavía seguía debatiendo ese espíritu romántico por la educación, sobretodo intentar estar inmerso en el contexto social de cada estudiante, pero es complejo y es peor si la familia muchas veces no ayuda en el proceso integral de cada niño o niña.

Pero los niños y sus padres no tienen la culpa de vivir en sitios precarios en las faldas de un cerro, muchas veces sin oportunidades laborales, rebuscándose y tratando de sobrevivir en una gran ciudad, por eso no les afecta en nada vivir en una zona de tolerancia o en un inmenso inquilinato en el centro de la ciudad. Estos niños y niñas solo dedican sus vidas a buscar la felicidad entre las tristezas que proporcionan la soledad, el maltrato o simplemente la indiferencia de la calle. Realmente tienen la fortaleza necesaria para enfrentar la vida, los pesimismos querrán estar ahí para aguar las esperanzas de muchos de ellos, con esas simples pero fundamentales lecciones me vine a dar cuenta  que yo no me preparé para enseñar sino para aprender.


En este tercer año, las cosas siguen cambiando, los dos hermosos angelitos que se desahogaban conmigo, terminaron siendo en dos hermosos angelitos que trabajan en paz y tranquilidad, aun me considero un primíparo; a veces se tiene que hablar duro y aunque me consideran gruñón todo el grupo de 2do y 3ro me muestra su amor y cariño con una pequeña carta o un sincero abrazo.


Tal como lo había aprendido de un abuelo: siempre estaremos destinados a caminar por la vida, hacer de ella un tejido y sobre todo a aprender de cada cosa que nos encontremos por este camino; por eso es difícil aceptar que los docentes no queremos aprender, que solo queremos repetir lo que nuestros “profes” han repetido durante décadas. A veces ando en los dilemas de la vida, a veces pienso si la mejor opción fue haberme preparado para ser docente. Algo es cierto, ya comprobé que un docente siempre va llorar de alegría al ver a sus estudiantes crecer para la vida. Y lo han logrado…


miércoles, 30 de noviembre de 2011

A LOS COLOMBIANOS...


Hoy después de tanto tiempo me he sentado nuevamente a escribir, a plasmar muchas veces un mundo imaginado, del que uno siempre sueña y que a pesar del pesimismo de las personas se convierte en un motivo más para vivir. He escuchado que una persona sin sueños termina siendo una simple maquina, y lo he visto por donde quiera. ¿Qué sería de nosotros sin algún tipo de inspiración? Parece que es real que ya nadie se interese en expresar lo que siente, es tan cierto que muchos se conforman con lo que ven, con lo que escuchan o por lo que les imponen, es un completo sesgo lo que ha hecho muchas veces la sociedad sobre nosotros, nos ha moldeado tan perfectos, que nos convertimos en excelentes sujetos parcos, seres que no necesitamos de nada, individuos que podemos vivir en paz dentro de nuestra egolatría, somos unos absolutos y completamente extraños.

Hoy nuevamente escribo lo que quiero y muchas veces no puedo, quiero porque es algo que siempre he anhelado, pero no puedo, porque sé que muchas de mis palabras ofenderán y herirán la susceptibilidad de otros. No por esto, le invito a que lea todo el texto para que conozca lo que yo realmente pienso y podrá sacar las mismas conclusiones que yo he planteado.

Pues mi motivo de inspiración han sido los colombianos, no hace pocas semanas tuve una de las peores experiencias de mi vida, con ciertas personas que se hacen decir que son colombianos. Al punto que he pensado en lo siguiente: Los colombianos son lo peor que uno puede haber conocido, otros se ufanan de ellos, pero nadie se ha dado cuenta lo que realmente son ¿Y qué son? Son unos mentirosos, utilizan su lengua para dañar al otro, crean calumnias, chismes e injurias, se han dado cuenta que es la única arma para acabar con la dignidad de las personas, son tan capaces de armar escándalos para que todo el mundo los escuche, son “tramadores”, saben convencer tan fácil, que cualquiera les hace caso, y lo peor es que dan su palabra, pero nunca la cumplen, son verdaderos demagogos, leguleyos, aprovechados y sobre todo humilladores.

Han condicionado a tantas generaciones, que la mentira no es lo único que se les ve, porque también son hipócritas, a cada uno les hace cara bonita pero por la espalda les lanza siempre el puñal, nunca ha de esperarse con alguien así, por eso es que muchos colombianos son desconfiados ¿Por qué? Porque como había escuchado alguna vez: son unos “palitraqueros”. Además son interesados, nada habría de esperarse de alguien que siempre quiere algo y por eso son manipuladores. Venden su imagen, venden su dignidad, venden su orgullo por cualquier cosa, no les importa nada, ni siquiera su cuerpo o la integridad de su hijo, nada mientras viva satisfecho entre los derroches del placer.

Porque también es irresponsable, malgasta y desaprovecha las oportunidades que le da la vida, siempre lo lamenta cuando lo ha perdido todo, aparte de eso, maldice las cosas que lo ha bendecido, se desquita con todo lo que ve a su alrededor, hasta de las mismas cosas inertes que nada tienen que ver con sus problemas; se desquita con sus hijos, con su esposa o marido, e incluso con sus padres, el colombiano es una persona grosera y violenta por naturaleza, siempre ha encontrado la forma de arreglar las cosas por medio de los insultos y las malas palabras, además, no pierde de lado su mentalidad pervertida, por eso le encanta hacer chistes “guarros” sin importar quien esté a su lado, los colombianos tienen una mentalidad retorcida, por eso se ha visto, como del ingenio y de su malicia han logrado ser los peores en la historia.

Los colombianos han utilizado el único recurso del que muchos se negarían hacer y por lo tanto se ha convertido en ofensa, a nadie le gusta que otro lo mande a comer de sus heces, todos han pasado por esa situación y por eso actúan como animales tirándose la “mierda” unos a otros. Por eso, siempre se ha visto que de los colombianos la forma única de solucionar la cosas a sido a los golpes, para muchos el conflicto se acaba con más conflicto, la disciplina se legitima con violencia, el odio a una persona o grupo en particular se soluciona con rencores y con groserías, igualmente, los colombianos se quejan de la vida, les encanta echarse “madrazos” para quedar más tranquilos. Todo es odio para los colombianos, para los que pertenecen a cierto equipo, para los que se visten de cierta manera, para los que se comportan mal, para los que son tercos y sobre todo, existe un odio para los que decimos la verdad.

Se quejan por todo, hasta por una enfermedad falsa; se quejan del sistema, se quejan de la familia, se quejan de los buses, se quejan de Dios como el máximo culpable de sus problemas, se quejan de sus caprichos, se quejan hasta de las cosas materiales que pierden, por lo que tienen que recurrir a las vulgaridades, se quejan de todo lo que pasa, pero lo más triste es que ninguno actúa de manera positiva por mejorar lo que han maldecido.

Si no se han dado cuenta, todo lo relatado es una queja mía hacia los colombianos, me estaría pareciendo a estos colombianos que no se creen colombianos, que lo mejor de sus vidas es haber nacido en otro lugar y que por lo tanto, desean o desearon autoexiliarse en otro país; esto se parece a aquel colombiano de cuyo nombre no menciono, que escribe bonito y directo, que cuando habla de Colombia lo trata como “un país de mierda” y la gente lo idolatra. Qué bonito país ¿Cómo uno puede sentirse orgulloso de eso? No trate de negar todo lo que he contado, porque usted también lo ha vivido alguna vez en su vida, no trate de ser indiferente a estas acusaciones, no se ofenda si ha entendido esto como una verdad y le pido no se ofenda, porque puedo creer que todo lo que he escrito aquí puede ser una mentira.

Parece que todo lo que he dicho a sido para otros un verdadero insulto, algunos ya pensaran que no soy colombiano, porque no amo a mi país y por que hablo mal de él. Igualmente, me recriminaran por mis acciones, me dirán que me valla para otro lugar sino me siento a gusto en Colombia “cuna de la democracia”, sugerirán que debería valorar lo que tengo y lo que me ha dado esta tierra, cosa que no hay en otros países. Pero yo les refuto y les contra pregunto ¿Acaso no ha sido víctima de robos? ¿Acaso ha visto que lo traten de la mejor manera en un bus? ¿Acaso le han respetado su vida, por el solo hecho que usted ha exigido que se haga justicia? ¿Acaso usted no se ha ofendido, cuando lo han tratado mal con groserías?

A pesar que muchos medios evidencian en magnas proporciones la imagen negativa de este país, pareciera que nadie se ha empeñado en mejorarlo. Hay algunos que han querido generalizar y empecinar con su existencialismo, lo feo del país. Puede que yo denuncie, ataque, hable mal de las cosas que uno ha visto. Pero no puedo negar que yo soy colombiano, que mi apellido puede que no sea el más español de los apellidos, pero sé que viene de los lugares más hermosos: de los mansos y tranquilos campos de Boyacá.

No me ha parecido bueno hablar mal de los colombianos, no puedo negar a mi madre, aquella que me dio la vida; de mi padre y sus consejos excepcionales; de mis hermanos o aun así de toda mi familia; puede que mi abuelo halla heredado todo eso malo, porque era un hombre que imponía poder; pero me di cuenta hasta el ultimo día de su vida, que siempre trató de ser una persona sincera, así lo fue, que estaba preocupado por los suyos y que nunca los descuidó, pudo haber sido la persona más dura y fuerte, pero algún día tuvo que ablandar, ese fue mi abuelo.

No puede uno olvidarse de los verdaderos amigos de corazón, que están en las buenas y en las malas, que saben confiar y que han confiado; a mis grandes amigos que son colombianos, les tengo todo el cariño y aprecio porque de  ellos, también he sido un mejor sujeto. Solemos encontrarnos con personas que realmente terminan dándole el golpe por la espalda ¿pero acaso no le pasa eso a todo el mundo? He compartido con muchos de mis amigos, los sueños de libertad (a pesar que para otros es inalcanzable) estoy seguro que todo esto no puede ser un imposible.

Puedo decir que todo esto, es una cuestión de mentalidad, a nadie le cuesta aceptar el pasado histórico por el que ha estado sucumbido este país, ni siquiera se han preguntado el por qué de tantas guerras, el por qué de tanta violencia, el por qué de tanta pobreza, etc. Quizás, la gente se acostumbró a tantas cosas, que perdió su lado sensible, por lo que ahora le parece normal ver tanto muerto, tanto desconsiderado, a tanto miserable por la calle. Y pueden seguir hablando mal sobre la gente que está por encima de ellos, pero no son capaces de proponer cambios reales. Realmente es un asunto de mentalidad.

Es que no solo de la “criticadera” se cambia las cosas y por ello, es el motivo de este texto, que fue inspirado en aquella clase de décimo grado, convencido que ya era hora de cambiar. Muchas veces hay que seguir hablando de manera pesimista, de las cosas malas y negativas que hay, para generar consciencia, porque me he dado cuenta, que sí me pongo hablar que en este país no pasa nada y que todos viven en armonía, la gente seguiría acomodada, sin razones para pensar diferente y por lo tanto adormecida. Yo estoy seguro que muchas cosas de las que dije al comienzo no son ciertas.

Me acordaré de aquellas palabras en las que una estudiante, me reclamaba que por qué yo tenía que hablar mal del país, sabiendo que este tiene muchas cosas maravillosas. Me alegra bastante encontrar gente que todavía encuentra cosas positivas a su alrededor. Esa era la gran tarea que tenía en ese momento, poder sensibilizar a un pequeño grupo de estudiantes; aunque soy realista en que no podré transformar a todo un mundo, estaba seguro que sí podía cambiar a una sola persona, esta podría hacerlo igual con otra.

¿Por donde debemos empezar entonces? A reconocernos nuevamente, a tomar un espejo, a concertinos y darnos “picos”; puede ser lo más ridículo, pero al menos le ayudara a quererse un poco. Todavía la gente se preocupa tanto por el otro, que anda más pendiente de lo que hace (de sus triunfos, fracasos y estilos de vida) que se ha olvidado de sí mismo, se ha convertido en un completo extraño, se ha condenado en ese eterno retorno de la violencia y la mezquindad, ha utilizado sus intereses personales para dominar y manipular a otros.

Sí piensa que todas esas cosas que he dicho al comienzo no son ciertas, demuéstreme todo lo contrario, sea capaz de asegurarme que usted no es eso. Pero no invente mundos fantasiosos, porque eso sí es negar la realidad que vivimos, quizás, esa es la excusa de muchos que se esconden en el alcohol, en las drogas y otros malos vicios, para evadir sus responsabilidades de este mundo.

Cambie su mentalidad, sabe que está cansado de la falsa realidad que siempre le inventan en los medios o en las opiniones de otros, pero eso sí, sea consecuente de sus acciones y no legitime más lo que le han condicionado, considérese una persona renovada, capaz de cambiar a pesar de los obstáculos, de las otras personas que desean que usted esté arruinado. Piense primero en usted, luego en usted y finalmente en usted. Este es el ejercicio del amor propio, sí supiera lo importante que es usted, no estaría quejándose de lo que siempre lo atañe. Sí la gente aprendiera a querer al otro, a pesar de las cosas malas que le pudieran haber hecho, todo sería distinto; nos cuesta tanto querer al otro, que ni siquiera somos capaces de querernos a nosotros mismos, le pregunto ¿Le cuesta mucho este ejercicio?

Gran parte de los errores que siempre pasan en este país, son por culpa de las actitudes de las personas, este tema lo podría seguir alargando, pero la intensión que tenía aquí, era hacerle saber, que yo todavía guardo la esperanza de ver una Colombia diferente a todas esas falsas verdades que nos han creado, creo que usted también guarda esa esperanza y por eso, no puede ser un imposible!!!

Estoy seguro, que más de un pesimista que justificó todo lo que yo dije al comienzo, ya habrá renunciado a la lectura de este texto; ojala algún día pueda cambiar su mentalidad y demuestre lo contrario. Por lo pronto, aquellos que se sienten capaces de seguir soñando, les invito a valorar esas cosas que muchas veces pasan ante ustedes de manera inadvertida, cosas que hacen parte de su vida, que son su motivo de ser, esas cosas que los hacen sentir vivos.

Valore a su familia; valore a sus verdaderos amigos; valore las oportunidades; valore los sabios consejos; valore los paisajes de su tierra, el cántico de las aves, la suave melodía que se da en el amanecer; valore todo lo bueno que han hecho por usted; valórese a usted mismo, su vida, su salud, su integridad personal, quiérase, ámese, sonría, pero por nada del mundo, nunca olvide, que de sus decisiones responsables, consecuentes y coherentes, está el destino de un hermoso país llamado Colombia.

viernes, 13 de mayo de 2011

MANUAL PRACTICO PARA EVITAR SER ROBADO

Tal como usted lo ha visto, nos encontramos en una situación de inseguridad donde todos los ladrones están al asecho de los pobres e indefensos ciudadanos, han sido varios años donde las personas han tenido que denunciarlos y a pesar que muchos de estos pilluelos son arrestados, emerge nuevamente otro ladrón de cualquier lado para asaltarlo. Así mismo, usted ha tenido que despojarse con mucho dolor de sus pertenencias y sin poner resistencia terminó siendo atracado con cuchillo o con revolver; algunos actuando de mártires han dado su vida por evitar que le robaran su celular, sus tenis o simplemente el dinero que llevaba consigo a la hora del asalto. Otros terminan heridos por los golpes de la cacha de la pistola, el puñetazo o el madrazo, porque nada mas doloroso que se le metan con la mamá.

Las autoridades han actuado y en algunos casos fueron efectivos, sin embargo, todavía sigue uno viendo en muchos medios impresos amarillistas los constantes robos. Tal como lo había relatado en un texto anterior, siempre le he preguntado a los lectores si han sido victimas de un robo y me había dado el gusto de hacer una tipología para poder identificar los distintos ladrones. En esta ocasión, me senté ha redactar un manual muy practico que si usted lo toma en serio le será muy útil, esta guía sería aplicada para aquellas personas que fueron robadas por sujetos que andan en buzo desteñido, con tenis barato de 20,000, con pantalón blanco, cachucha deshilachada, aspecto desagradable y mal oliente con tufo de “cannabis” y con hablado de gamín (eso si aclaro, no voy a generalizar que todos aquellos que se visten de esta forma sean ladrones, mas los que son ladrones por lo general se visten así, bueno, conozco otro caso de ladrones que andan en saco y corbata pero eso es otro tema).

Le invito haga efectivo esta guía que fue preparada con una minuciosa investigación, basada en la experiencia de estar a cada rato en la calle haciendo vueltas, ademas, no es aconsejable que coja el bus a ciertas horas de la noche donde todo el mundo lo mira y lo vigila, en serio tómelo como algo personal y no valla terminar paranoico.

No cargue un celular de alta gama: Unos de los objetos mas robados son los celulares, puede que usted ande enamorado de su BlackBerry, de su Android, de su Nokia o de su Iphone, lo tenga activado por plan de datos y por pura “chicanería” le encanta mandar trinos o publicar fotos como cualquier reportero ciudadano. Evite eso, usted no quiere que le roben su juguete, le aconsejo que cada vez que salga a la calle, cargue un celular flecha, en una ciudad como Bogotá no es para dárselas de mucho, que aparenta estatus y que tiene mucho dinero para ser atracado. Que si es asaltado, que le pase lo que a mi me pasó, que me quitaron un teléfono Amba (esos que no tienen sim card) y al ver que no tenia un alto valor comercial, me lo arrojaron al piso y me dijeron sin tanta emoción que era mejor que me comprara algo que valiera la pena. Cargar un celular flecha puede convertirse en un verdadero repelente para ladrones.

Póngase el atuendo adecuado: No le aconsejo que ande en ruana porque se le pueden burlar, pero tampoco sería recomendable andar con ropa que llame la atención de los ladrones ¿Que ladrón no le encantaría tener una chaqueta de Arturo Calle, una Abercrombie & Fitch o una Tommy Hilfiger que le costo a usted buscarla por Internet, a parte de que tuvo que partirse el lomo para ahorrar y comprársela? Igualmente, es mejor que cargue solo tenis baratos, yo se que a usted le encanta andar “pinchao” en tenis de 200,000 pesos, pero también sabe que sus ADIDAS son lo único que tiene y a pesar que los pudo conseguir más baratos en una ganga de bodega, es mejor que no exponga su vida por ellos, sea realista, los tenis baratos evita los ladrones y le duran mas. Su atuendo debe ir acorde al contexto indicado, es mejor ir bien camuflado entre la gente del común, que aparentar que es mucho sin tener nada, así nadie se dará cuenta quien es usted, a menos que le encanta ir a la zona rosa de Bogotá.

No cuente el dinero en la calle: Acaba de recibir su salario y sabe que se hizo un buen mes, sabe que tiene lo suficiente para gastar su dinero en cosas excéntricas y que ademas de eso, por fin se dará gusto comprando cosas que antes no podía, pero por todas las cosas del mundo evite contar dinero en la calle, a parte que es un signo de inseguridad porque teme que se le acabe el dinero, va a llamar la atención de los ladrones, por lo general los billetes de alta denominación activa los sensores de alerta de cualquier ladrón y con un infalible radar usted es rastreado y seguido por donde valla. Si usted es de los que les encanta estar en el centro, tampoco lleve muchas monedas como cualquier alcancía, también puede llamar la atención de cualquier indigente que se le acerca a pedir dinero y dependiendo de las circunstancias usted puede verse intimidado de alguien que no ha comido nada y que en una traba bien “jarta” ha utilizado un pedazo vidrio para que le dé todo lo que tiene. Cargue solamente lo que va a comprar, pero tampoco exagere, después se queda sin dinero.

Hay que estar alerta en cada momento: No termine como paranoico mirando con sigilo a las personas que se encuentran al lado suyo, pero tampoco dé papaya. A un libro no se le juzga por la portada sino por el contenido, por eso mismo no haga juicios de aquellos que lo estén mirando mal, puede ser que tengan las cejas pobladas. Si usted va con el atuendo adecuado, es prudente con lo que hace, no demuestra que es superior a otros y a parte de eso se encuentra en un sitio no grato de confianza, téngalo por seguro que no le pasará nada. Sin embargo, esté alerta en cada momento, como le decía anteriormente, no sea valiente yendo para su casa a media noche sabiendo que le a tocado tomar transporte en una avenida no segura, si es necesario camine rápido, si le piden la hora, diga que no tiene reloj así se le trate de salir de la manga, ponga su celular en vibrador, puede que el ring tone polifónico de su smartphone lo delate y por nada evite quedarse solo, busque grupos de personas que al igual que usted tienen miedo de ser robados y lo miran con sigilo si usted es o no es ladrón. Que no le pasé lo que a mi me pasó que por poco armo un pánico colectivo, cuando yo empecé a moverme al mismo tiempo que se movía una muchacha hacia un poste, al tiempo que un joven que no tenia un buen aspecto (aclaro, no era ladrón) se movió en la misma dirección mía y de la muchacha, y luego nos miramos con desconfianza pensando quien iba a robar a quien.

Reaccione cuando sea conveniente: Se sabe que usted esta alerta en cada momento, pero habrá un instante en el que usted ya está en inminente peligro de ser asaltado, por supuesto, no termine actuando como mártir a la hora que sea atracado por alguien que lleva un cuchillo o una pistola, es mejor que entregue lo que le están pidiendo con todo el dolor del mundo. Pero si sabe o se ha dado cuenta que el ladrón no lleva algún objeto con lo que le esté intimidando, reaccione. Haga ejercicios vocales para aumentar la intensidad de sus gritos, si sabe que le pueden salir los famosos “gallos” vocales, cargue un pito si es oportuno, también cargue un enjuague bucal por si le han tapado la boca con la mano y usted ha tenido que morderlo (puede ser mas peligroso una infección bucal que un intento de robo), ademas, intente hacer ejercicios de patada y puño, puede ser vital a la hora de corretear al ladrón. Igualmente, desconfié de la forma como alguien se le puede acercar para hacer una pregunta que no cuadraría con el contexto indicado, ejemplo: Si usted se encuentra en un sitio que esta lejos del estadio del Campín, no viste ninguna prenda de un equipo de fútbol y ademas en su cara ni se le nota que le gusta este deporte, pero alguien se le acerca a preguntar donde se consigue una boleta para ver a Millonarios, yo le recomiendo que mejor salga a correr, de pronto el que le está preguntado (que no lo quería robar) lo tilde de loco al salir usted disparado, pero es mejor que lo traten de loco, a que usted de ingenuo por ayudar a un hincha desorientado termine asaltado con ese truco tan bajo.

No sea temeroso y enfrente a la persona cuando sea necesario: Vuelvo y repito, la idea es que usted no termine siendo el mártir a la hora de ser asaltado con algún arma, nunca dé su vida por cosas meramente materiales, así sea por su computador portátil que le costo mas de 2 millones de pesos (quien lo manda sacarlo). Solo actué cuando el ladrón no lleve algún objeto que pueda herirlo. Teniendo en cuenta esto, dese cuenta que un ladrón a la hora de robarlo tiene mas nervios que el propio asaltado, juegue con esa premisa: trate de encararlo; si es el caso de alguien que ha venido a pedirle dinero y le dice que usted tiene plata por los tenis baratos que lleva, utilice excusas como: “hermano ando mas pelado que usted”, “ usted supiera lo que llevo, nada”, “Aquí donde me vé estoy regateando lo del bus, o sino con mucho gusto le doy” “Soy estudiante de publica, usted entiende como le toca a uno de duro”, “hermano, trabaje, busque ayuda pero deje de pedir plata”, “respete hombre, no ve que tengo hambre, trabaje (respuesta agresiva)”, “soy sordo, no lo escucho (aparenta hacer señas de sordo)” “hay viene mi bus, viene bus, después... (toma cualquier transporte, hasta que se da cuenta que no es el que lo lleva a su casa)”. Estas son algunas excusas que son practicas y han salido efectivas, usted mismo puede crear sus propias excusas, pero evite titubear o incluso “debajearse” a la persona que le esta pidiendo dinero, es posible que el indigente le de lastima y termine dándole a usted la limosna.

No espere nada de nadie: Sea realista, cuando lo están robando, todo el mundo lo ve pero nadie reacciona, incluso muchos quedan preguntando: ¡¡¡Miren!!! hay va el ladrón... Que desgraciado, yo me lo suponía... Esa ratica le estaba echando ojo, ¿Lo robaron?, Yo pensé que era amigo suyo, porque vi que estaban recochando, ¡¡¡Que susto!!! ¿se encuentra bien?... En el mayor de los casos, todos quedan quietos, mudos y sorprendidos, pero ninguno reacciona; bueno, hay sus excepciones de algunos que con zancadas de atleta alcanzan al ladrón hasta ser linchados. Habría que saber quienes son estos hombres o mujeres que dan su vida por usted para estar al lado de ellos. Dicen que la primera autoridad es la debe velar por su seguridad y esta es la policía, pero este manual en ningún momento quiere deslegitimar su acción, si usted ha sido victima de un robo no se espere nada de la policía, usted ha llamado al 123 y en el mayor de los casos le indican “espere un momento mientras llegue la móvil”, la móvil llegó una hora después de que usted llamo, mientras tanto el ladrón iría por el cuatro porro después de haberlo atracado. Tampoco habría que hablar de la incompetencia de los agentes de policía, porque en ocasiones han dado efectivos resultados, desarticulando y atrapando ladrones, el inconveniente llega cuando todas sus pertenencias ya fueron vendidas en el mercado negro y nunca volverá a ver la maleta que con mucho cariño le regaló su mamá.

Otro tips importantes: Si usted va salir hacer alguna diligencia, se encuentra en el bus o en el taxi y va hablar por celular, es mejor que tenga las ventanillas cerradas y si están cerradas asegúrese que tengan el pasador colocado, no se confíe, los ladrones a pesar que tiene una mano inmunda son delicados para extraer con precisión el objeto a robar. De la misma manera, evite tomar atajos oscuros e inseguros para llegar mas rápido a su destino, puede que le salgan dos “malandros” bien trabados o en su caso un perro feroz con rabia. Si sabe que carga harto dinero evite guardarlo en los mismos sitios donde los ladrones saben donde usted lo lleva: en los bolsillos del pantalón, de la camisa, en la maleta o en los zapatos (si su zapatos son caros es probable que se quede sin dinero y sin calzado) por esto mismo, es aconsejable guardar sus pertenencias en sitios inimaginables para algún ladrón: en los calzoncillos o en un sostén (si quiere evitar algún contacto físico con su dinero ya que puede estar sucio, sea creativo confeccione bolsillos especiales a su ropa interior) pero téngalo por seguro que nunca un ladrón le ira a manosear en aquellas partes, de hacerlo usted divinamente lo puede acusar de robo y abuso sexual.

Espero que este manual halla sido de su gusto y que lo haga practico en el momento necesario, en el caso que le sea efectivo, le agradezco difunda cada una de estas recomendaciones para evitar que muchos sean atracados. En el caso de no serle efectivo, también le pido el favor me recomiende que consejos pueden ser mejores y mientras hace eso, búsquese un servicio de escolta para que lo acompañe, porque a lo mejor a usted le encanta andar en una ciudad bien pinchado, aparentado cosas, hablando en la calle con el celular ultimo modelo, atrayendo a los ladrones y acordándose que debió leerse bien este manual para evitar ser robado.

sábado, 2 de abril de 2011

REALIDAD O FANTASÍA


Este era un día tan normal como cualquiera, si, como cualquier martes, miércoles o jueves, tan normal que los mismos estudiantes de la universidad llegaban a estudiar, a hablar, a tomar un tinto o simplemente a calentar el puesto como si la altura de la Macarena A se asentara al nivel del monte Everest; eran tan normal este día que aquellos que habían tenido ayer pereza, les tocaba hoy trabajar mas fuerte y sin descansar.

Tan seco por fuera y tan mojado adentro por el notable problema de humedad en el techo, el salón de clase estaba cayado ante la intervención de la gotera y la enérgica voz del profesor, mientras tanto, entre los asistentes hablaba calladamente y rumoreaban entre dientes el “parrandon” que iba a ocurrir mas tarde. Aunque sabían que estaban hablando en clave para descartar que alguien regara la chiva, realmente se acercaba una verdadera fiesta donde nadie quedaría excluido. Así pasaron los minutos y mientras el profesor continuaba con su clase, la gotera inadvertida funcionaba como si fuera un reloj, donde cada gota que caía asimilaría un segundo trascurrido.

Frente al goteo constante, se había determinado que la clase ya iba a terminar, aunque el centro educativo no era un monasterio medieval, en el se había hecho sonar dos fuertes campanadas que indicaría las doce del mediodía. Pero era un sonido tan confuso, que algunos que se hallaban lejos de las aulas pensaban que estos se debían a sonidos que provenían de la construcción cercana, realmente lo que no se sabia era que esta es la fiesta de bienvenida a los primíparos de la universidad, por eso cuando ocurra algo parecido no descarte que usted está en las festividades de la papa y la pimienta.

En fin, han pasado los sabrosos diez minutos del almuerzo, pero después de los dos campanazos fuertes se me había olvidado las ultimas palabras del enérgico profesor que luego de mirar sospechosamente hacia la plaza salió rápidamente hacia la séptima. En mi duda acudí aquella plaza, cuando encontré una gran masa de personas, un profundo silencio en el sitio me había hecho confundir, pensé un momento que teníamos que rendir indagatoria ante un grupo acusador, me acordé entonces al coro de viejos ancianos que auguraban el fin de los tiempos. Todas estas percepciones no se desligaban de la realidad, por que aquellos ancianos que acusaban ante otros sus problemas, actuaban de una manera tan doctrinal, que sus pregones se escuchaban en coro y a parte de ello se encontraban envueltos bajo trapos negros.

Pum... pum... es la respuesta del sermón de la verdadera palabra a un joven negligente, que considera que la palabra “revolución” no puede estar empuñada con las armas. Yo realmente había llegado al lugar equivocado, por que a los alrededores del claustro ya estaba un escuadrón de tortugas y robocops, que promulgaban que el orden se legitimaba mediante de la fuerza que para ellos era la unica verdad. En ese instante me había acordado de las explicaciones de aquel profesor que se hallaba de camino a su casa.

Con un silencio escalofriante, me pregunté por dentro: ¿por que estos argumentos no se ajustan a lo que yo pienso?… aunque el acto de pensar ha costado tanto, el solo hecho de expresar lo que yo quiero, podría generar en contra respuesta algo muy fatal... pero prefiero pasar de inadvertido y comer callado, que asumir y mostrar una falsa verdad. Frente a estas meditaciones sabia que no podía expresarme de esta forma y sobre todo al publico, incluso en un ambiente donde no sabia si muchos de los que andaban callados estaban aceptando las doctrinas salvadora de la revolución.

No entendía todavía en que momento la fiesta iba a comenzar, el grupo de los robóticos como la de los monjes encapuchados listos estaban ya, a cada quien le gusta el sancocho de tropel, a mas de uno le gusta la papa con pimienta, pero creo no querrán que se la sirvan en su cara.

Pero esto es la pura realidad:

Como es visto todos los años, los días de "foforro" se inician con el pregón del capucho, haciendo sonar siete bombazos, numero cabalístico que representa los integrantes participes, los intentos por evitar que la gente se valla y las veces que se metió la policía a dar macana. A parte ello, el pregón capucho se inaugura con un show de gases que las tortugas despliegan, aquí el llanto no para, ni tampoco los constantes ataques con cocteles molotov y las inofensivas balas de goma.
Participar de estas fiestas permite que usted sea experto en pogo y rumba, desahogara todos sus problemas, liberara todo el resentimiento contra el sistema, además usted quedaría registrado en la historia como son los libros y los expedientes de la policía y la fiscalía. De seguro no encontrara algún concierto que le llame la atención, pero si lo cogen lo acusaran de concierto para delinquir, por eso el que vive es el que goza y si quiere gozarse esta verdadera fiesta disfrute de los chorros a presión de agua que le lanzará los carros tanques.

Si hay que entender la lógica de este tipo de eventos, trate de buscar al encargado que unta de la famosa tinta invisible para que siga la rumba en algún calabozo de la U.P.J. Algunos han bautizado estas fiestas como la feria de la piedra y el bolillo. Por ello, evite que su universidad sea una trinchera de rumba, no se deje convencer de los discursos doctrinales, ni asuma una posición represora por defender el orden legitimo considerando que la paz se llega solo con violencia, evite ser producto del estigma que genera como cortina de humo de los diferentes medios de comunicación, haga algo mas productivo que leer las gacetas culturales y educativas del periódico del “Espacio” y la revista “SOHO”. Tome conciencia pero no beba mas cerveza, investigue y busque la verdad, pero no se deje convencer de las falsas ideas de viejos que consideran que todavía una revolución armada y encapuchada ayudara a solucionar problemas como el aborto, el homosexualismo, la hambruna, la falta de alimentos o aun así al problema del calentamiento global. El verdadero sermón es amar a sus enemigos y no hacer al otro lo que no quieres para ti. Ame para servir y sirva para amar.

Entonces ¿De que manera usted puede defenderse sin la necesidad de utilizar la violencia de las palabras? O ¿Emplear a nuestra gente como barricadas o instrumentos de la guerra para legitimar un supuesto interés general? Será que ¿Está en hallar, identificar e investigar nuestros problemas, actuando críticamente sin violentar y además demostrar desde la racionalidad, la consciencia, la coherencia con participación social, la verdadera necesidad del ser humano? No podemos esperar y justificar una revuelta, no podemos legitimar las falsas acciones con solo lanzar piedras y gritar arengas, estos actos al final de todo es una alienación, es un juego de títeres donde nos dejamos comprar por el mejor postor, donde nuestras luchas se convierte en verdaderas rumbas. Entonces ¿Somos verdaderamente conscientes de lo que hacemos y de igual manera con las personas que nos rodean?

lunes, 20 de diciembre de 2010

LA DECENCIA DE LAS PERSONAS

(Reflexión personal cuasi sarcástica, irónica y humorística del 29 de febrero del 2008)

Hoy por hoy como dice el “slogan” de Caracol, vivimos en un entorno totalmente plural. Hoy por hoy los niños no tienen novia a los quince años sino a los doce, hoy por hoy hay mas bebes y hoy por hoy los buses andan más llenos, sin olvidar que el recordado “cebollero” que eran llamados a los buses que hoy son chatarrizados, pasaron a ser los lecheros del transmilenio. Cuando mi abuelo era más joven la vida era más duradera, la panela no era tan vieja como el concentrado de siete granos o el baile de la gallina saraviada y sin importar nada la gente era más prudente y más decente.

Si, decente por que mi abuelo y sus amigos (el señor Santa fe, don Luis Laverde, don Jeremías, don Luís Chaparro, el señor Flores etc.) azotaron la baldosa con los mas inofensivos pasillos y guabinas. Decentes por que el que pecaba y rezaba empataba, por que no podría levantar la voz a sus mayores…por obvias razones se podría ganar su bofetón en la “jeta”. La decencia de la gente de hace treinta y cincuenta años permitía ver en la sociedad el manejo de las buenas costumbres con proyección moral. Esa decencia era el reflejo en la mismas groserías, los borrachos pedían permiso para salir de las tabernas y tenia la posibilidad de no condenarse al infierno si asistía para toda su vida a misa de doce todos los domingos (incluyendo los novenarios de semana santa y las misas de gallo a fin de año), era prudente si se ganaba el bingo o la lotería y gastaba su dinero con sus amigos en chicha, cerveza, lechona etc. etc. etc.…Para los abuelos eso era ser prudente.

La decencia del bogotano y de aquellos que llegaban al centro del país hace mucho tiempo, no se compara con la decencia de las personas de ahora… seré prudente, por que la prudencia hace verdaderos sabios, sin embargo, la prudencia ha roto con los limites de la actitud y el comportamiento humano. Podemos ejemplificarlo en dos casos interesantes:

No hace mucho tiempo los jóvenes bogotanos fascinados y llevados por la emoción de la música alimentaron su ego por la presentación excepcional de un grupo de rock (rocas en inglés). Cabe mencionar que los jóvenes de hoy en día se aguardan en diversas ideologías -no como antes- cuando se pertenecía al partido liberal o al partido conservador, llevando festones y banderitas de color rojo y azul, sino pasiones llevadas a prácticas que según los sociólogos de la calle constituyeron las culturas juveniles. Mayo del 68 rompería los esquemas de lucha estudiantil y daría una fuerte repercusión incluso en los países de América Latina, por hoy encontramos hoppers, metaleros, punteros, salseros, vallenateros, reguetoneros, gomelos de diversas ideologías políticas (anarkos, comunistas, fachoparacos, apolíticos, liberales, chavistas, castristas, orteguistas, osamistas, estalinistas, bushistas, budistas, uribistas y cualquier mezcolanza lanzada desde los medios masivos de comunicación que han enseguesido la información en general)… procurare no extenderme en esta gran hibris de ideologías y posiciones tanto políticas como sociales.

Como decía anteriormente el gran grupo que deslumbro a los jóvenes rockeros era la mítica banda “Iron Maiden” o “la dama de hierro” que se enruanó a su llegada a Bogotá.

Nota: el idioma ingles ha tenido predominio universal en los últimos años, por ejemplo un caso particular es la transversarción con otras lenguas como el español, es por eso que podemos verlo que en Colombia se habla “spanglish” -como aquella película-, en este aspecto el inglés se constituyo en unos de los puntos vitales de la transformación social en Colombia, por lo tanto, el agua de panela bailable paso a ser el “Alter Party”, los grados del bachillerato se simplificaron en un “prom”, las carpetas de presentación se convirtieron en “Broshure”, los club sociales se convirtieron en “Facebooks” y el transmilenio ahora se pronuncia “trainsmileun”…

En fin este grupo (airón meiden) representado en la figura de los súper abuelos agitaron las emociones de los asistentes jóvenes que no rebasaban de los 28 años para abajo, nunca habían venido al país incluso desde hace 30 años en que fue fundada la banda. Como buenos ingleses que son, han cantado a las conciencias rebeldes, aquellos que protestan del inconformismo de la sociedad y sus altos índices de pobreza, del estado y las viles guerras desatadas, de la iglesia y su corrupción, de los medios y su mal información… a este concierto, proletarios y niños “de dedo parado” han pagado precios desde 70.000 hasta 170.000 pesos por un espacio de meditación y pogo.

Sin embargo, al tiempo llegaba al país otro grupo (no musical) pero muy particular… venia de la soberana isla, guapachosa, gozona y rumbera (Puerto Rico) uno de los mejores predicadores de la iglesia mas sectaria que ningún blasfemo halla conocido, un predicador con mejor escolta que incluso ridiculizaría la seguridad personal del mismo presidente de los Estados Unidos… había llegado Byron Méndez (como lo vio este es otro nombre en ingles muy españolizado, por eso y para mejor pronunciación diga Bairon Mendes).

La secta de Byron ha llevado por mas de veinte años blasfemando en el nombre de Dios, esta secta ha roto estatuillas de santos de todas las tallas, han desojado biblias que no sean de su edición propia, han dicho mas groserías que una maratón de barras bravas entre hinchas del Nacional, Santa fe, Millonarios y América de Cali mismo, como si uno de sus principios dijera: “insultaras a tu prójimo sobre todas las cosas”.

Mientras en un lado los súper abuelos con sus letras confusas -por que todos los asistentes no saben ingles pero repiten a medias las fuertes canciones- pretenden de una vez por todas buscar un justo orden social o el caos de la existencia humana, por el otro lado un maniaco que le llaman “el gran maestro” por sus predicas, busca desestabilizar la sociedad para encontrar la salvación de algo que realmente no esta ni en la Biblia.

Seria de película “De los creadores de ¿Quién se llevo mi queso? Y “la culpa es de la vaca” un nuevo estreno que usted si no esta ubicado lo encontrará “los dioses deben estar locos”. ¿El horóscopo lo hubiera predicho? ¿Será que en algún momento se refleja la decencia que les había comentado anteriormente? ¿Esto era lo que querían los abuelos mediante un “jolgorio” sano con correa?

No era inevitable, los dos eventos habían iniciado, por lo cierto el concierto y la predica se encontraban relativamente cercanos, uno en el Simón Bolívar y el otro en el coliseo, realmente los astros estaban en posición… en posición de escape por tales sucesos. El que entraba al concierto pagaba boleta, el que entraba a la predica pagaba boleta, cada quien debía tener un atuendo adecuado; es sabido que para estar en un concierto y mas de Rock no se entra en smokin con corbata y por ello como requisito mínimo debía tener una camiseta de Eddy (la mascota de la banda) con su nueva imagen: una ruana boyacense, un carriel paisa o un sombrero voltiao.

De igual manera con el gran maestro Byron no se podría entrar de la forma mas sana y puritana, entrar a este tipo de predicas debía mínimo tatuarse con las tres insignias de su congregación o casa ministerial, tenían que ir llevadas en los brazos, piernas o hasta en las nalgas, sin embargo, no dejare de lado un dato especial: Byron Méndez había sido fan numero uno de Iron Maiden cuando tenia 19 años, ahora con cincuenta años se ha hecho reconocido con su “best seller” ¿Cómo pecar sin ofender a Dios?.

Según el gran maestro el divino niño se unió a las divinas de patito feo y que Jesús no era de Nazareth sino de un barrio llamado Galicia que quedaba cerca a la autopista sur, que Adán y Eva no fueron tentados por una serpiente sino por un acreedor bancario que les vendió un apartamento en la urbanización del “paraíso” y que dios les tuvo que embargar por colgarse en las cuotas y que Pablo no era Pablo sino la representación simbólica de los picapiedra. Aun así, a las precisiones religiosas del maestro, hubo simpatía para que este llevara consigo una camiseta de Eddy ya que sus ídolos se encontraban muy cerca y debía rendirle un culto espiritual. Aunque el día fue lluvioso el infierno ardía con intensidad (para aquellos que creen que ese estado de la conciencia existe).

De milagro frente a los sanos eventos, la ciudad ha salido del caos juvenil con un alto desespero que no es ese reflejo de la prudencia de los abuelos.  El trabajo mejor pagado había sido el de los ESMAD que no se hacían sentir desde el paro civil del 1977, las balas de caucho y unas cuantas bombas inofensivas han controlado los intentos de desorden, perdón de orden social.

En una próxima ocasión les contare como identificar a partir de su perfil aquellos lugares que hacen que usted realmente se pierda, por ahora, espero que el próximo concierto de Rock se lleve en la vereda mas lejana y remota del país, el trancón que aguanté por ese concierto casi estalla mi noble tranquilidad, aun si me hubieran bombardeado con cinco horas de Rumba Stereo.  También acabé de enviar una carta a José Luís miranda mejor conocido como el “papi” (supremo reverendo de Creciendo en Gracia) para que la próxima convención de locos a la que pertenece fanáticamente el hermano Byron, se logre llevar en las áridas playas de la Antártica o en el salón de convenciones que se encuentra ubicada al lado del campamento cuatro del monte Everest.

De mi abuelo que está en el cielo, me lo estaré imaginando con los nuevos pasos de Guabina y torbellino que le esta enseñando a San Pedro y a toda la corte del cielo. Por ahora iré a averiguar si Giovanni Ayala ya grabó su ultimo desconectado por MTV; por que como eso también les gusta los jóvenes, yo como joven no me quedare atrás… por el momento.

sábado, 27 de noviembre de 2010

COMO NOS CAMBIA LA VIDA

Como alguna vez había escrito en el muro de mi Facebook cuando Bogotá se encontraba cumpliendo años, cantaba el orgullo que tenia por mi ciudad haciendo la adaptación de esta singular canción de “soy colombiano” interpretada por muchos artistas nacionales.

 "A mí que den un ajiaco, un ajiaco bien santafereño,
de esos que llevan guascas, arracacha y mucha papa,
no me den plato extranjero, es caro y no sabe a bueno,
mejor sírvame de seco harto arrocito con huevo...
hay que orgulloso me siento de ser yo un buen bogotano..."

Ese memorable 6 de agosto cuando justamente era un día anterior para que el abominable régimen de Álvaro Uribe entregara el poder para dar inicio al abominable régimen de Juan Manuel Santos, reflexionaba de corazón porque me sentía orgullo de ser bogotano. Me sentía orgulloso de ser rolo, orgullo de pertenecer a la segunda generación de mi familia en vivir en esta gran ciudad, orgulloso de conocer gente tan maravillosa, porque si lo han detallado Bogotá reúne una cantidad regiones en un solo lugar desde vallunos, paisas, costeños, boyacenses, santandereanos, insulares, comunidades afros e indígenas a pesar que muchos de ellos se les ve mendigando en las calles del centro de la ciudad.

Orgulloso de vivir a ratos en una calurosa nevera, orgulloso de vivir en una de las mejores panorámicas de esta ciudad, orgulloso de tener uno de los parques naturales más grandes de Latinoamérica dentro de un perímetro urbano, orgulloso de saber que todo lo que pueda buscar lo encuentro en el centro, incluso estoy tan orgulloso de nuestro sistema masivo de transmilenio.

Por supuesto que cada uno de los habitantes de esta ciudad deben sentirse felices por este sistema, de saber que fue uno de los proyectos pioneros a finales de los 90 en Colombia e incluso de América Latina, el transmilenio al igual que el café se convertiría en producto de exportación llevando este mismo modelo a otras ciudades, monopolizando y dando fin a la corrupción en el transporte público.

Así fue, los fallidos sistemas integrados, desde el naciente tranvía, los buses de diferentes denominaciones, los inservibles trolle bus e incluso los sistemas rústicos de bus que se intentó llevar por algunos años en la caótica troncal de la Caracas dieron paso a la innovación y la vanguardia de una ciudad que estaba en desarrollo. Tal como lo había planteado el ex alcalde Enrique Peñalosa en su gobierno, transmilenio seria un sistema que cambiaria la vida de la ciudad y así fue, el gran eslogan de este sistema se denominó: Transmilenio un sistema que nos cambia la vida.

Se daría fin al paradigma de lo cochino, de lo vulgar, de lo iguazo, de lo gamín (a pesar que hay algunos que rondan por ahí) de todo lo significativo que fue la ciudad antes, era la transformación que daría Mockus con el primer paso hacia una Bogotá mas cultural y Peñalosa con su visión de desarrollo modernista que le daría una resignificación importante al espacio. Transmilenio fue uno de ellos y como nos ha cambiado la vida…

Al igual que el soldado Domínguez (aquel rescatado por la operación jaque) yo podía decir lo mismo, “como nos cambia la vida ayer fui uno y hoy soy otroooooooo”. En lo personal transmilenio me ha cambiado constantemente la vida, desde el primer momento cuando mi papá me llevó junto a mis hermanos hasta la estación del parque tercer milenio en el centro, para realizar el paseo inaugural en este sistema, se sentía tan lujoso a pesar de la apretujadera, el bus no lo jaloneaba tanto, para bajarse no necesitaba de timbres y de madrazos, los pasajeros contiguos no lo miraban con intensiones de robarlo, no había ruido constante, no habían vendedores o indigentes pidiendo dinero, me sentía en otro lugar, nos cambió la vida y es en serio, porque ese primer día el bus nos dejó en la estación de la calle 80 con avenida ciudad de Cali y nos toco tomar el rustico sistema arcaico y retrogrado de trasporte conocido como buseta.

Como nos cambió la vida, como aquella vez que incluso relaté en uno de mis primeras historias publicada en una revista, cuando venía de Suba desde la casa de mis tíos, siendo las 10 de la noche un domingo, ubicado en la estación de la granja esperando un bus cuando un vigilante a mas de 30 metros gritaba con ánimo "que le corriera" por que el próximo bus era el último en recoger y yo en cámara lenta desesperado echaba zancadas de atleta para alcanzar a tomarlo, luego sabiendo que era una ruta que llegaba hasta el tercer milenio pensativo y desesperado, me preguntaba como un muchacho de 19 años iba a meterse a las profundidades de San Victorino siendo pasadas las 11 de la noche para coger un bus ordinario que lo llevara a la casa, pero de las preocupaciones se vino a la alegría cuando a los pocos metros de la estación nos rebasaba rampante otro vehículo que se dirigía al portal de Usme.

Pero eso no fue todo, al bajarme en el tercer milenio y luego tomar el nuevo bus, cambiaba mi vida con el sufrimiento de estar tan apretujado como nunca lo había vivido en un articulado como estos, llegaba literalmente sin ropa en la estación del Restrepo porque cada entrada y salida implicaba manoseo con desvestida incluida, literalmente había llegado como una arepa espichada a mi punto de destino, ese día jure nunca más viajar en transmilenio…

Justo unos meses después, mi vida cambiaría poniéndola en riesgo, había caído en el error de asegurar que eso fue aquella vez (me refiero a lo que les había comentado anteriormente) “vámonos en transmi ¿que puede pasar?”… pues esa vez me encontraba en la casa mi abuelo en el norte de la ciudad y junto a mi padre decidíamos ir por transmilenio por que lo único correcto de este sistema era lo rápido en cuanto al desplazamiento. Así fue, por ser la hora del momento el único bus disponible nos llevaría a una estación antes del punto de destino, cuando fuimos hacer el trasbordo venia lleno, pues ni corto ni perezoso nos metimos cuan sardinas enlatadas, sin darme cuenta se cerró la puerta, parte de mi zapato y toda mi maleta quedó por fuera del bus apresada por el cierre, siempre me alcancé a lastimar un brazo, jure y sin vacilar que nunca más montaría en transmilenio… si como no.

Todas mis afirmaciones de no montar en este sistema siempre fueron un vacilón, porque hubo cantidad de veces que tuve que utilizarlo, desde aquella vez que me pasé a dar un verdadero tour por todos los portales por que no los conocía, bajarme a media estación por un colapso, de meterme improvisadamente por el torniquete por que había salido por error del sistema o incluso irme (porque me tocó) ya que era el único servicio disponible por la hora.

Pero hace poco recibí otra gran enseñanza de este gran sistema que ha cambiado mi vida por completo,  aprendí  a tener más paciencia y aguantar de todo corazón los regaños del mundo gracias a transmilenio. Cuando usted tiene responsabilidades y compromisos importantes ¿que tiene que hacer? por supuesto, a ser cumplido como sea. Cuando usted tiene una cita a las 8 de la mañana al otro lado de la ciudad y sabe que como mínimo debe tomar en cierto horario el servicio ¿a que horas debe ir?... pues como mínimo a las 6 si es que no quiere que lo coja algún improvisto.

Si usted supiera que todo eso que les comenté lo hice con el fin de llegar temprano y cumplir mi cita y no se llevó a cabo ¿que pensaría el respecto?... que realmente soy muy “debuenas”, así pasó, un martes a las 6:00 de la mañana cuando todo el mundo salía a trabajar me encontré con un sistema de buses llenos a reventar (nada extraño para mí), del cual tome la opción de coger un bus hasta el portar del Tunal y poder abordar un expreso que me llevara rápido hasta el portal de Suba. Todo calculado, sabía que por tarde llegaría a las 7:30 a.m., para el colmo todo iba tan bien cronometrado hasta cuando llegué al tramo de la Av. Caracas con Calle 50 cuando un gran trancón represaría todos los buses que se dirigían al norte y al noroccidente.

Ya eran las 8 a.m. y todavía no había llegado a la estación de Flores, me encontraba en plena Calle 63 desesperado, refunfuñando, ofuscado, iracundo, respondón y con unos cuantos soliloquios me sentía aburrido de haberme ido por transmilenio, finalmente al Portal de Suba llegué a las 8:45, era mucho valor contestar el celular y decirle a mi tío, que están haciendo arreglos en toda la troncal y que hay sitios donde han habilitado un solo carril, que también hubo represamientos y no sé como carajo se colapso el sistema porque estuve en un trancón de más de 1 hora…

Y fue una gran semana, porque el viernes tuve otra situación similar de la cual me hizo acordar de aquel momento cuando por error tome mal un servicio de alimentador, enviándome a las 11 de la noche al barrio Lisboa, fue tanta la adrenalina y el temor que me corría de haberme perdido, que hizo que yo andará más de 20 cuadras desesperado, siempre preguntándome: Porque el chofer del alimentador se parece aquel de los Simpson cuando Lisa toma mal un bus y a la intemperie el conductor le indica que esa es la última parada, esto no es ciencia ficción es pura realidad, ni con mis suplicas me quiso llevar el conductor por que había una cámara dentro del alimentador y que posiblemente lo sancionarían,  me había quedado solo en uno de los últimos barrios del noroccidente considerados uno de los más peligrosos; menos mal llevaba dinero del que me sirvió para tomar un taxi y quedar tranquilo.

Pero esa no es la historia final, ¿Cómo un viernes en la noche se viene otra vez a colapsar el sistema? Eso pasa solamente en Bogotá, lo bueno fue que ese día no tuve que irme de pie en todo el trayecto, miraba a todo el mundo que iba apretujado, me timbraban constantemente al celular confirmando que iba en camino, hasta cuando un terrible trancón de nuevo en la Av. Caracas terminaría con todo, tenía toda la paciencia que había acumulado el martes, pero ya había superado satisfactoriamente el trancón y dirigiéndome al portal siendo las 10:45 cerca a la estación de 21 ángeles en la Av. Suba, se vararía este imponente bus que nada se compara con los antiguos “Cebolleros”.

Más de 20 minutos esperando el carro taller, la gente al igual que yo estábamos cansados, por compasión el conductor abrió las puertas de emergencias del articulado para que saliéramos mientras se desvararía, sin embargo, era demasiado tiempo, ya iba tarde de nuevo, tenía una cita con mi tío, ahora si no me iba a perdonar. El tiempo se había vuelto oro y tenía que tomar una decisión: coger un bus pero casi todos iban a centro Suba, esperar a que se desvare el articulado o caminar, decidí tomar un taxi, mi tío que me esperaba le había cogido el sueño, eran pasadas las 11 de la noche pero sabía que estaba de nuevo en mi destino.

Finalmente después de esta situación, quedé tranquilo porque no me había pasado nada y lo decía con razón porque llevaba 200 mil pesos. Esto realmente me ha cambiado la vida al punto que he llegado a conclusiones importantes:

1.       No puedo jurar contra el santo nombre de transmilenio por que siempre me va tocar irme en el.
2.       Si se que un bus va lleno (a reventar) no se me ocurrirá meterme como sea en el.
3.       Procuraré no irme después de las 10 de la noche para que no me toque correr entre la toda estación.
4.       Si me encuentro en un trancón pues esperar.
5.       Si voy en un alimentador y tomo el equivocado miraré si realmente lleva una cámara escondida.
6.       Siempre cuando sea necesario llevo lo del taxi.
7.       Procuraré que la próxima vez que llegue tarde no sea con mi tío.
8.       ¿Saben que? Mejor me voy para el campo.

jueves, 28 de octubre de 2010

3 SEMANAS

El hombre se ha preocupado en aprender toda su vida,
pero en mi caso solo habían sido tres semanas.
Tres semanas en donde he votado incluso seis años,
pero seis años que me han enseñado a ser más humano.

Si tan solo dijera ¿Qué he aprendido hoy?
He aprendido a llorar y a reír
también he aprendido a sufrir y por supuesto a vivir.
Mi espíritu romántico me ha llevado a pensar en la humanidad,
pero el humano no ha sabido respetarse, ni mucho menos valorar.
El exceso de la libertad se ha convertido en una catástrofe más…

No puedo pensar así,
yo merezco un mundo mejor.
Pero todo el mundo se ha interesado por las apariencias,
definitivamente se ha perdido la esencia.
No puedo negar que mi mundo se preocupa más por la eficiencia.

Tan solo han sido tres semanas revueltas,
tan solo he vivido una experiencia a cuestas.
He perdido la noción del tiempo,
mi rumbo tiene un sentido incierto.

Arrojo la toalla y mejor me resigno,
o mejor asumo mi reto
y acepto lo que es debido.
Algo si he aprendido:
que hay que valorar más a la humanidad,
esto no es trabajo por caridad.

Mi altruismo me ha llevado a buscar lo deseado,
a una vida de apariencias he renunciado.
Tan solo puedo pensar de estas 3 semanas de experiencia,
que el  amor es una alegría en efervescencia…
esto es una mezcla entre apuros, entrega y demasiada paciencia.

Espero algún día
volver a leer estas palabras
y reflexionar que en estas tres semanas,
he vivido de todo
desde afanes y esperanzas…